Pasaje de las Escrituras: Mateo 22:34-40
En Mateo 22:34-40, somos comandados a amar a nuestro Señor Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con toda nuestra mente. También somos comandados a amar a los demás como a nosotros mismos.
Las restricciones del Coronavirus de quedarse en casa han limitado nuestro viaje hacia cualquier campo de misión en la tierra exceptuando el que pasamos por alto más seguido: el lugar donde vivimos.
Nota dos principios primarios en el mandamiento de Jesús: El Principio de la Proximidad y el Principio de la Gentileza. Dios nos ha puesto cerca de personas específicas con un propósito específico en mente––que los amemos de forma que refleje a nuestro Padre Celestial!
Dios nos está llamando a que invirtamos en nuestros vecinos cuando sea necesario, y ultimadamente, que les mostremos la gentileza de Dios a nuestros vecinos. Somos presentados con una oportunidad preciosa, durante estos tiempos sin precedente, de amar a las personas donde estamos.
Discusión
• ¿Cómo se verá para ti el pasar tiempo intencional con tu Padre Celestial esta semana?
• ¿Existen barreras que te están impidiendo llegar a tus vecinos? Si es sí, ¿cuáles son?
• ¿Como puedes amar y atesorar a tus vecinos durante este tiempo sin precedentes?
• ¿En qué formas específicas puedes interceder en oración por tus vecinos?
Oración
• Ora por tu corazón y pídele a Dios que lo ponga en línea con el Suyo.
• Ora por tu hogar y pídele a Dios que una sus corazones y que los use para el crecimiento de su Reino.
• Ora por tus vecinos. Pídele a Dios que incline tu corazón a amar y atesorar tus vecinos bien. Sé sensible al liderazgo del Espíritu Santo al acercarte a tus vecinos.